La celebración cotidiana de la Eucaristía es para los alumnos el centro de toda su vida personal y comunitaria. La oración personal, el sacramento de la Reconciliación y la dirección espiritual ayudan al progreso y consolida la personal relación con el Señor.
Una vez por semana la comunidad se reúne para la adoración eucarística. Y con una periodicidad, al menos mensual, se brinda a sus miembros alguna reflexión espiritual.
Cada año el Colegio ofrece Ejercicios espirituales a los miembros de la comunidad. Todos los alumnos han participan en ellos, al igual que en los retiros espirituales de un día que se organizan mensualmente.